Entrevistamos a Ernesto Knörr, uno de los escultores vascos con más renombre de nuestro país, formando parte de importantes colecciones públicas y privadas. Pese haber nacido en Vitoria, ha desarrollado gran parte de su trabajo en Asturias. Pero también en Barcelona, Madrid, Andalucía, Alicante… y ahora, por fin, podemos disfrutarla en Valencia. Su última obra, “Árbol de mariposas” ha sido inaugurada en la sede de Laboratorios Sesderma en Puzol, Valencia.
- Hola Ernesto, estamos encantados de tenerte en casa. Nos encantaría saber cómo surgió la idea de hacer esta obra.
El Dr. Serrano y yo nos conocimos en los Premios Mujer Sesderma 2019 ya que yo creé el premio que se otorgaba. Allí surgió la idea y entre los dos la fuimos perfilando. Finalmente creamos “Árbol de mariposas”, una metáfora de la vida que representa la diversidad. Un tronco que se bifurca y enriquece en su conjunto.
- ¿Dirías que, como una mariposa, tus obras se han transformado, han evolucionado, con el paso de los años?
Sí, por supuesto. Siempre vas madurando y evolucionando. De hecho, 2Árbol de Mariposas” es algo totalmente nuevo para mí. Sí que tengo esculturas con algunos toques de color, pero es la primera vez que lo introduzco con un papel tan protagonista y estoy muy contento. Quizá me he abierto un camino interesante.
- En un mundo ahora tan en desequilibro, tú siempre buscas la geometría y el equilibrio en tus esculturas, ¿qué te inspira esta simetría?
Esta tendencia es algo innato en mí, algo que me surge porque sí y no tiene explicación. Voy construyendo a base de primas, siempre buscando el equilibrio y las proporciones, a veces imposibles. Mi objetivo es crear piezas que no dejen indiferente.
- En el contexto actual, en el que la internacionalización juega un papel tan importante, has querido plasmar el mundo en tu obra a través de los colores ¿qué buscas expresar con ellos?
Por un lado, los colores del árbol representan las diferentes naciones o étnicas, pero, a la vez, simbolizan la increíble internacionalización de un laboratorio como Sesderma, con su vocación de llegar a todo el mundo. Una empresa que pasó de ser local a llegar a no dejar de crecer, entendiéndose en muchas partes. Como la escultura.
Además, como decía, el árbol es una metáfora de la vida y algo vivo necesita color y diversidad. Es la clave para ser diferente y emocionar. Estoy muy contento con el resultado.
- Al igual que Sesderma encuentra la belleza en la piel, tú la encuentras en la escultura. ¿Qué significa para ti la belleza?
Para mí la belleza es emoción. Lo que más me satisface de mi trabajo es descubrir que hay gente que se emociona al ver mis obras, igual que yo al crearlas. A veces el arte deja indiferente y yo busco lo contrario, que emocione a cuanta más gente mejor y compartir esa emoción que yo siento cuando las hago.
- ¿Hay alguna de tus obras por la que sientas especial cariño?
A “Árbol de Mariposas” ya le tengo especial cariño. Noté que vibraba desde que empecé a montarla. Tiene una diversidad que enriquece.
- ¿Dónde podremos ver tu próxima exposición?
Por la situación actual me estoy dedicando a los encargos particulares, pero mi próxima exposición será en Santander el próximo año.