La radiación solar, aunque es vital para la vida, puede ser un arma de doble filo para nuestra salud. Desde quemaduras hasta cáncer de piel, sus efectos nocivos son bien conocidos. A continuación, exploramos los peligros del sol y cómo protegernos con REPASKIN.
La luz solar es esencial para procesos biológicos como la síntesis de vitamina D, pero su exposición excesiva puede conducir a serias consecuencias para nuestra salud. En particular, una exposición prolongada al sol sin protección puede provocar quemaduras, inflamación y cáncer de piel.
Ante este panorama, es vital tomar medidas para protegernos del sol en todo momento. Por eso, el uso de protectores solares adecuados se convierte en un hábito fundamental para preservar la salud de nuestra piel y prevenir futuros problemas.
La línea REPASKIN de Sesderma ofrece una gama completa de protectores solares diseñados con la exclusiva tecnología Shield System, un escudo protector formado por filtros físicos y químicos, antioxidantes y enzimas reparadoras. Esta innovadora fórmula no solo protege contra los daños causados por la radiación ultravioleta (UV) sino que, además, trabajan activamente para reparar los posibles daños ya causados en la piel.
En la línea REPASKIN encontrarás desde diferentes texturas y acabados para adaptarse a todo tipo de piel hasta fórmulas específicas como REPASKIN URBAN 365, que contiene activos adicionales para enfrentar los desafíos de la vida urbana como la luz azul que proviene de las pantallas o la contaminación en la ciudad, o la conveniente bruma facial solar de REPASKIN COMFORT, que permite una fácil reaplicación incluso sobre el maquillaje.
En resumen, con la protección adecuada y el cuidado de nuestra piel podemos disfrutar de los beneficios del sol sin comprometer nuestra salud a largo plazo. Descubre la colección completa de solares REPASKIN y elige el producto que mejor se adapte a tus necesidades.
Con diferentes texturas y acabados para tu piel: Tacto seda, Tacto seda con color, Fluido invisible o Toque seco.
Contiene además activos concretos para diferentes preocupaciones de la piel: niacinamida, ácido hialurónico, centella asiática, o ácido azelaico entre otros.